Corrido del psicólogo Armando Gómez Villalpando

Voy a hablar de profesionistas que trabajan con personas, con sus emociones vistas, u ocultas en otras zonas. Hay gente que los rechaza: “no voy porque no estoy loco”, pero dice mucha raza “con uno encontré mi foco”. No hacen curas milagrosas porque no son charlatanes pues se ocupan de otras cosas: se preocupan porque sanes. No malgastes tu dinero yendo con gente dudosa: ve a un psicólogo certero que sepa cómo es la cosa. Cuando eres tú su paciente, checan tu comportamiento, analizan tu inconciente, calibran tu sentimiento. Y si acaso no mejoras pues no resultaron las cosas no te hacen sufrir más horas pagando sesiones tramposas. Si necesitas ayuda manda al diablo al qué dirán no te quedes con la duda: ¡dáte un quemón de diván! Ya me despido con esta y les tengo que decir: ¡anden, juéguense la apuesta de al psicólogo acudir!